La disciplina de monitorear

Los medios digitales sin duda alguna han revolucionado la manera en la que la gente se comunica, interactúa y comparte una diversidad de informaciones que circulan a cada segundo en internet o en el entorno offline.

Es parte de la vida diaria de muchos de nosotros compartir un enlace que nos parece interesante en Facebook, subir una foto o comentar en Instagram, compartir o criticar la publicación de una marca, de un amigo, de un medio de comunicación. Estas actividades permiten a las múltiples redes sociales y websites que utilizamos a diario, recopilar información sobre nosotros, más allá de los típicos datos demográficos. Nuestros perfiles son categorizados en base a nuestros intereses, actividad y el tipo de contenido que compartimos.

Esta valiosa información, recopilada a través de una combinación de herramientas, les permite a las marcas segmentar a sus potenciales consumidores, diseñar y ejecutar estrategias digitales con mayor eficacia y ser mucho más eficientes en términos de su inversión.

Y a pesar del gran valor que aportan las herramientas de medición y monitoreo digital, no muchas marcas ejercitan esto como parte de la disciplina que supone conocer todos los aspectos del comportamiento de nuestros consumidores actuales y potenciales, de la competencia, de la categoría, del mercado.

Un monitoreo permanente -no solo cuando surgen crisis o conatos de éstas- proporciona una ventaja competitiva a la marca frente a sus competidores. Pueden anticiparse situaciones que de no ser detectadas a tiempo afectarán la imagen de la marca, se identifican temas de interés y de tendencia para la estrategia de contenidos, encontramos insights valiosos y conocemos lo que la gente conversa o comparte.

En resumen, un monitoreo permanente basado en la escucha social activa aporta nuevas perspectivas sobre las acciones a llevar a cabo, recogiendo información sobre lo más importante: la gente que consume o podría consumir nuestra marca.

Finalizo compartiendo algunas recomendaciones, desde la experiencia en Brandsmart Digital Agency:

Establezca objetivos de monitoreo.

Defina qué va a monitorear: ¿la marca? ¿la competencia? ¿una campaña? ¿una crisis? ¿un grupo de usuarios? Esto le permitirá delimitar y segmentar la información que necesita en el mar de contenidos que es la web.

Defina zona geográfica y un período de tiempo específico para el monitoreo.

Las razones son obvias aquí, no es lo mismo medir un mes que un año ni Santo Domingo que República Dominicana.

Identifique las variables correctas en cada canal.

Medir cualquier cosa por medir no tiene sentido, medir lo que es relevante, sí. Establezca los KPIs adecuados por cada acción que ejecute y mida resultados a partir de esto.

Defina un presupuesto para herramientas de pago.

Ciertamente hay muchas y muy buenas opciones en internet sobre herramientas de medición gratuitas -tal es el caso de la poderosa Google Analytics- pero en la mayoría de los casos, las herramientas gratuitas siempre tienen limitaciones en cuanto a alcance y funcionalidades. Ya está más que claro que Digital amerita un presupuesto apropiado para los resultados que ofrece.

Incluya datos cualitativos en sus reportes. 

No se limite a números en sus reportes de monitoreo, son un indicador importante pero un enfoque cualitativo de la medición le permitirá identificar insights sobre el comportamiento de sus comunidades y hacer más eficiente la gestión.

¿Cuál otra recomendación incluirías?